RESPIRACIÓN

Después de la medianoche y antes del mediodía
asienta la respiración y siéntate a meditar.
A medida que la energía circula a través del doble desfiladero y de la columna vertebral
y sigue a través del cerebro,
obteniendo el poder de la energía
contempla la esencia del yo
El secreto de la flor de oro (Clearly, Thomas 1995, editorial Edaf, Madrid p.172)

RESPIRACIÓN

Respirar es vivir, es la función fisiológica en la que también interviene la voluntad
La respiración es un proceso aparentemente automático, comienza el día de nuestro nacimiento y termina el día de nuestra muerte. Decimos aparentemente, porque se supone que es inconsciente, porque además, respiramos en forma adecuada mientras estamos dormidos.

Nosotros respiramos inconscientemente y también podemos respirar conscientemente. El corazón late sin esfuerzo consciente de nuestra parte y sin hacer nada digerimos la comida, sin embargo la respiración la podemos cambiar, eso es parte del maravilloso diseño del ser humano, porque muchas de las tareas del cuerpo están dirigidas por la parte automática de nuestro cerebro para permitir entonces que la conciencia se ocupe de cuestiones más profundas, y más complejas.

La respiración, así como es un proceso inconsciente también se puede convertir en una práctica consciente y al hacerlo una práctica consciente, podemos respirar para lograr diferentes objetivos.

Por ejemplo,
en este momento puedes tomar conciencia de la respiración,
llenar de aire los pulmones,
retenerlo unos segundos
y expulsarlo suavemente mediante un suspiro
y lanzarlo con fuerza.

Todo ello porque tu sabes que lo puedes controlar. Al respirar conscientemente estamos manejando la energía, estamos sintiendo el movimiento de la respiración dentro de nosotros y estamos también haciéndonos conscientes de nosotros mismos como individuos, integrando las funciones del cuerpo con las funciones de la mente y del espíritu.

Cuando tenemos conciencia de nuestra respiración, la conciencia del organismo y de todo lo que le rodea se hace mayor, cuando inhalamos conscientemente expandimos positivamente todo el entorno; al exhalar conscientemente ayudamos a que se relajen todas las energías conectadas entre sí. Cada momento de respiración consciente es una contribución de la creatividad con el fenómeno de la vida.
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Respira profunda , suave y dulcemente,
con todas las células de tu cuerpo;
libera tu mente de preocupaciones y ríe con mucha alegría.
Respira el amor, la esperanza, la inmortalidad de tu espíritu,
al hacer esto puedes comprender la respiración humana.
Llena tus pulmones de aire...
retenlo unos segundos,
eso es, muy bien;
deja escapar el aire suavemente;
observa tu cuerpo mientras haces este ejercicio;
deja que se relaje todo tu cuerpo,
deja que se relajen tus pies, piernas, deja que todo se relaje.
Presta mucha atención mientras sigues respirando,
a los cambios que se producen en tu cuerpo.
También fíjate en los sentimientos que aparecen por tu mente,
toma conciencia de los pensamientos,
mantén todo eso el tiempo que puedas,
tomas aire y retienes; eso es,
deja salir lentamente el aire, dulce y calmadamente.
Repite este proceso unas cinco veces,
respiras hondo, retienes el aire todo el tiempo que puedas
y luego lo botas con calma,
con mucha fluidez,
mientras suavemente te vas relajando.

Cuando respiramos, estamos intercambiando energía entre el medio y nosotros, absorbemos energía del ambiente, porque la respiración es un mecanismo vivo que pone en movimiento, este sutil intercambio. Los seres humanos y todos los seres que respiran convierten la energía y la transforman a través de la respiración. Con cada aliento captamos y transformamos la materia prima del cuerpo y de la mente. También existen algunos aspectos cualitativos de nuestra respiración. La conciencia que poseemos sobre nuestra respiración, determina la forma de nuestras manifestaciones físicas y mentales. Sabemos que el aliento tiene un ritmo, una velocidad, una intensidad; y ese aliento es el vehículo por el cual nuestra energía circula y se irradia a través de nuestro ser hacia el medio; por eso es importante saber cómo manejar la energía de nuestras vidas.

Respira y cuéntame cómo te va